MP3 Lucy Fabery / Humberto Ramírez - Humberto Ramírez presenta: Divinamente, Lucy Fabery
Latin Jazz
9 MP3 Songs
JAZZ: Latin Jazz, LATIN: Bolero
Details:
Lucy Fabery:
Personalidad auténtica del filin
Los más versados conocedores han calificado el caso de Lucy Fabery como milagroso. Porque, después de sobrepasar el medio siglo de triunfal e intenso quehacer artÃstico, esta diva conserva sus facultades vocales en condiciones envidiables. Igualmente, el porte y la elegancia que la caracterizaron desde sus albores en el mundillo de las candilejas continúan adornando su figura. Se trata de la más original e internacional exponente puertorriqueña del filin – vocablo derivado del inglés feeling –, fusión desarrollada en La Habana a partir de 1947, que aúna al bolero antillano con el jazz estadounidense.
Su nombre completo es Luz Ercilia Fabery Zenón y vio la primera luz en Humacao, un 25 de enero. Desde su más tierna infancia estuvo expuesta a la música, pues su padre, Rafael «El Indio» Fabery era violinista destacado, mientras que su progenitora, Petra Zenón, dirigÃa el Coro de la Escuela Superior de su pueblo. No era de extrañarse entonces que, tanta influencia, la impulsara a inclinarse por el arte del pentagrama.
Luego de concluir sus grados académicos regulares ingresó a la Universidad de Puerto Rico para cursar la carrera de PedagogÃa y asà complacer la voluntad materna. Fue a partir de esta etapa que se motivó a emprender formalmente la que serÃa su brillante carrera artÃstica. Al tiempo que formaba parte del Coro universitario, consiguió la oportunidad de hacer pinitos en programas musicales.
Pocos después fue contratada como atracción permanente del centro nocturno El Morocco, situado en el sector santurcino de Miramar. Su éxito allà fue tan resonante que el ya consagrado cantante cubano Miguelito Valdés «Mister Babalú» – a la sazón estrella del aledaño Club Caribe, del Caribe Hilton – la conoció, se enamoró perdidamente de ella y se convirtió en su mentor.
Mientras tanto, Lucy Fabery continuaba siendo figura habitual de «El Morocco», que promocionarÃa sus actuaciones allÃ, a través de la Prensa diaria, identificándola como «La Muñeca de Chocolate».
Sin embargo, la caracterÃstica que más cautivaba al público que acudÃa a aplaudirla era su belleza sepia, que acentuaba luciendo largos pero ajustadÃsimos vestidos, diseñados con el premeditado fin de resaltar su escultural figura… aunque apenas les permitieran caminar y moverse en el escenario. No fueron pocos los cronistas que reseñaron sus actuaciones enfatizando en su “escandalosa forma de vestirâ€. Pero, quienes a ella le interesaba gustar, la aplaudÃan hasta el delirio. Los demás podÃan tragarse su puritanismo o reventar de vergüenza ajena.
Por su parte, Miguelito Valdés agenció su debut ante el público hispano de Nueva York, mismo que aconteció en el Manhattan Center. Allà compartió cartel con Gilberto Monroig, César Concepción y su Orquesta, Luis Cruz y Sus Marianaxis, Ãngel Vitoria y Su Conjunto TÃpico Cibaeño y el grupo del pianista Joe Blanco, que la acompañó.
Valdés resultó un extraordinario padrino artÃstico para nuestra compatriota. Porque, además de enseñarle los secretos del negocio del espectáculo – y de alertarla en algunos casos – e inculcarle disciplina en el trabajo, le sirvió de puente para su debut en Cuba, plaza que visitó constantemente durante el último lustro de la era pre-castrista para presentarse en escenarios tan exclusivos como los cabarets El Tropicana, Capri y El Parisién, del Hotel Nacional, asà como en los sintonizados programas “Casino de la alegrÃaâ€, “Desfile musical†y “Jueves de Partagásâ€â€¦. ¡sin haber grabado todavÃa!
Luego de que acompañara a su mentor en una serie de presentaciones en Lima y Ecuador, vino a ser durante su segundo viaje a La Habana que el sello Panart le brindó la oportunidad de grabar su primer LP, dirigida por el prestigioso Julio Gutiérrez.
Haberse familiarizado en aquella plaza con figuras del calibre de José Antonio Méndez, César Portillo De la Luz, Fernando Ãlvarez, Elena Burke y otros exponentes emblemáticos del filin, la estimularon en estudiar más concienzudamente los legados de las vocalistas Ella Fitzgerald y Sara Vaughn, cuyos estilos influirÃan marcadamente en el que comenzaba a desarrollar de manera definitiva. Y, en la onda filinista, muy bien orientada por el maestro Gutiérrez, se acreditó sus primeros éxitos discográficos: “Tentación†(de José Antonio Méndez); “Eres sensacional†(de Senén Suárez) y “El hombre que me gusta a mÆ(de Frank DomÃnguez).
Fabery entonces vio materializado su gran sueño de presentarse en México. Ese contrato le fue extendido por AgustÃn Barrios Gómez, propietario del cabaret El Afro. Su éxito allà fue tan fenomenal, que su estadÃa en la capital azteca se prolongó, pues la RCA VÃctor la reclamó para grabar el que serÃa su segundo álbum – con orquesta dirigida por Mario Ruiz Armengol, reconocido como el mejor arreglista del paÃs – y, además, le surgieron intervenciones especiales en tres pelÃculas: “¡Ay, Calipso, no te rajes!â€, “El hombre que me gusta†(inspirada en la canción que la dio a conocer en esta plaza) y “México lindoâ€.
En lo sucesivo, sus visitas a México serÃan frecuentes apareciendo además en los programas televisivos de mayor sintonÃa, en los teatros de variedades más importantes y en las pelÃculas “MelodÃas inolvidables†y “El súper machoâ€.
Viajó repetidamente a Argentina, Colombia, Ecuador, Perú, Uruguay y Venezuela. AllÃ, además de sus primeros éxitos, las melodÃas que le identificaron fueron “Tengo que acostumbrarmeâ€, “¿Qué sabes tú?â€, “Luna de Miel en Puerto Rico†y “Tu felicidadâ€.
En la década de 1960 estableció el precedente de ser la primera estrella nacional en presentarse, a nivel estelar, en los principales salones de los hoteles Flamboyán y Caribe Hilton. Entrada la década de 1970 – además de en La Copa de Champagne, en México – eran habituales sus temporadas en el Embassy Club del Hotel Embajador en Santo Domingo; el cabaret del Panamá Hilton y, en Puerto Rico, los centros nocturnos Ocho Puertas, Hipocampo y Caimito Country Club.
Lucy Fabery no frenarÃa su actividad artÃstica con el trascurrir del tiempo. Incluso, durante las décadas de 1980 y 1990 tuvo oportunidad de incursionar a la actuación dramática, teniendo participaciones especiales en varias telenovelas, unitarios y montajes teatrales. En el 1987 produjo un álbum titulado con su nombre en el que figuraron destacadamente los famosos hermanos jazzistas boricuas Jerry (trompetista y conguero) y Andy González (bajista) y el maestro Eddie Gómez (contrabajo).
Este nuevo trabajo que somete a la consideración de sus seguidores, “Divinamente… Lucy Faberyâ€, con una orquesta dirigida por el talentoso trompetista, arreglista y productor Humberto RamÃrez, evidencia fehacientemente el alto nivel de calidad que ella es capaz de proyectar después de tantos años de arduo trajÃn en las lides artÃsticas. Y como tal es puntal decisivo para la conquista de una nueva generación.
Humberto RamÃrez
primera figura del jazz en Puerto Rico
A partir del lanzamiento de su primera propuesta discográfica, “Jazz Project†(RMM/Tropijazz), en 1992, Humberto RamÃrez se consolidó como el más importante exponente e impulsor de la llamada “música de los músicos†entre los que desarrollan sus carreras en su patria, Puerto Rico. Desde entonces, cada año ha producido, por lo menos, un disco de jazz – en ocasiones, dos o tres – y, hasta el presente, ha experimentado con todo tipo de formaciones: duetos, trÃos, cuartetos, sextetos y, claro, banda gigante (o “big bandâ€).
Este talentoso trompetista, arreglista, compositor, productor y director de orquesta, nacido en San Juan el 31 de enero de 1963, es reconocido como uno de los músicos mejor preparados de nuestro paÃs. Inició su adiestramiento ejecutando el fliscornio (“flugerhornâ€) siendo muy niño. Cuando contaba 11 años de edad inició formalmente la que serÃa su exitosa trayectoria cuando su progenitor, el saxofonista del mismo nombre – durante años miembro de la orquesta de Bobby ValentÃn – lo incorporó al combo que entonces dirigÃa. Mientras tanto, proseguÃa su adiestramiento en la Escuela Libre de Música – donde fue discÃpulo de la reconocida profesora Nilda Pérez – y, posteriormente, en el Conservatorio. Ya para estas fechas era habitual en destacadas agrupaciones.
Durante el primer lustro de la década de 1980, Humberto RamÃrez cursó estudios avanzados en composición, ejecución e improvisación de jazz, en el prestigioso Berklee College of Music, en Boston. Luego, en Los Ãngeles, estudió música cinematográfica. Al regresar a su natal San Juan, encontró cabida en la orquesta salsera de Willie Rosario, convirtiéndose en uno de los pilares de dicha organización, a la que aportó su admirable capacidad como arreglista y productor, además de la de competente instrumentista. Aquà coincidió con los cantantes Gilberto Santa Rosa y Tony Vega, quienes jugarÃan un papel determinante en su ascenso profesional a partir de las postrimerÃas de aquella década.
Cuando Gilberto se convirtió en solista y formó su propia banda, Humberto fue uno de sus principales colaboradores haciendo gala de sus diversas facetas. Y, cuando Tony hizo lo propio en 1988, delegó en él la tarea de organizar y dirigir la suya. Aun asÃ, paralelamente continuó colaborando en las grabaciones de Gilberto. Y, además, participaba en producciones discográficas de otros intérpretes. Valga señalarse que su discografÃa como sesionista es muy extensa.
Sin embargo, su gran sueño era descollar en el ámbito del jazz con un proyecto propio. Ese anhelo se hizo realidad en 1992 cuando los empresarios Jack Hook y Ralph Mercado lo reclutaron para el sello Tropijazz, que acababan de fundar. “Humberto RamÃrez Jazz Project†(1992) y “Aspects†(1993) fueron sus primeros trabajos para esta empresa como figura lÃder. Tales discos le abrieron las puertas de eventos como el Puerto Rico Heineken JazzFest, las de escenarios como el Anfiteatro Tito Puente y los Centros de Bellas Artes de San Juan, Caguas y Guaynabo, asà como de importantes festivales jazzÃsticos internacionales.
Luego, bajo el amparo de AJ Records se editaron producciones suyas de muy alta calidad. Entre ellas: “Best Friends†– compartiendo crédito estelar con el conguero Giovanni Hidalgo – (1999); “Paradise†(2000); “Dos almasâ€, “Mi primer amor†– en el que retorna a sus raÃces, la salsa – y “Rumbantela / Let’s Go to the Rumba!†(2002); “Miles latinoâ€(2003) y “Duets†(2004). En estos discos comparte con jazzistas de la talla de Gonzalo Rubalcaba (pianista cubano); Horacio «El Negro» Hernández e Ignacio Berroa (bateristas, también cubanos); Alex Acuña (baterista peruano); Justo Almario (saxofonista colombiano); Mario Rivera (saxofonista dominicano) y, naturalmente, con los instrumentistas boricuas más admirados: desde Tito Puente, Dave ValentÃn y Hilton Ruiz, hasta Richie Flores y Egui Castrillo.
Finalmente en 2005 se dio uno de sus grandes sueños: establecer su propio sello discográfico. Con el lanzamiento de “Puerto Rico Latin Jazz Moodsâ€, la compañÃa Nilpo Music vio la luz, marcando una nueva etapa en su carrera musical en la cual ha sido acreedor de seis Discos de Platino, 12 Discos de Oro, seis Premios Tu Música, cuatro Premios Visionary, asà como un homenaje por parte del Senado de Puerto Rico.
Sin aminorar su propia actividad como jazzista, Humberto RamÃrez asumió la dirección musical de la orquesta acompañante de la estrella merenguera y pop Olga Tañón en 1998. Como tal, también se le encomendó la producción del álbum “Olga viva, viva Olga†(WEA Latina) grabado en directo durante la presentación de esta intérprete en el House of Blues en Orlando, Florida. El resultado no pudo ser más halagador. El álbum mereció el premio Grammy – categorÃa de Música Tropical – en la edición de 2000.
Humberto siempre tiene su agenda cargada de proyectos. Y “Divinamente… Lucy Faberyâ€, trabajo que acaba de realizar junto a quien es considerada la más importante filinista puertorriqueña, orgullosamente le convierte en puente generacional para el filin “a lo Faberyâ€.
Humberto RamÃrez presenta…
Divinamente…
Lucy Fabery
Repertorio:
1. Juguete (Bobby Capó) 4:25
2. Inevitablemente (Rodolfo Barreras) 3:56
3. Mi versión (Sylvia Rexach) 5:42
4. No llores más (Plácido Acevedo) 4:47
5. Un amor y una canción (Puchi Balseiro) (4:20)
6. Yo quiero un besito (Myrta Silva) 3:04
7. Simplemente una ilusión (Héctor Urdaneta) 5:12
8. Summertime (George Gershwin / Ira Gershwin / Du Hayward) 6:57
9. Como los demás (José Antonio Méndez) 3:03
Producción artÃstica, dirección musical y arreglos: Humberto RamÃrez
Producción General: Fundación Nacional para la Cultura Popular
Productor Ejecutivo: Javier Santiago
Músicos:
Humberto RamÃrez: Trompeta y flugelhorn
Angel David Mattos: Piano
MartÃn Santiago: Bajo
Fernan Rivera – BaterÃa
Gadwin Vargas – Percusión
Frankie Pérez – Saxofón Alto
Reinaldo Castellanos –Saxofón Alto
Manuel Pelayo – Saxofón Tenor
Roberto Calderón – Saxofón BarÃtono
Danny Fuentes – Trombón
Miguel Rivera – Trombón
Grabado y mezclado en Studio 233, San Juan, Puerto Rico
Ingeniero de grabación y mezcla: Gerardo López
Masterización: Digital Recording Services, Inc.
Ingeniero de masterización: VÃctor “Sonny†Hernández
FotografÃa carátula: Rafi Claudio
FotografÃa de sesiones de grabación: Laura Magruder / Yeisa Morales
Diseño gráfico: Juan Carlos Medina
Peinado y maquillaje: Nelly Jo
BiografÃas y ensayo del filin: Miguel López Ortiz
Escrito sobre Lucy Fabery: Ileana Cidoncha
ISBN 0_9633428-2-7
@ 2006 Derechos Reservados
Una producción de Fundación Nacional para la Cultura Popular
Apartado 9023971, San Juan, Puerto Rico 00902-3971
Teléfono (787) 724-7165 Fax (787) 725-2498
https://www.tradebit.com
e-mail: info@https://www.tradebit.com
Todos los derechos reservados. La reproducción parcial y/o total de esta producción, sin autorización escrita de la Fundación Nacional para la Cultura Popular constituye un delito procesable bajo las leyes del Estado Libre Asociado de Puerto Rico y de los Estados Unidos de América.
La Fundación Nacional para la Cultura Popular es una organización sin fines de lucro incorporada en 1996 (Registro 28,558), con el fin de recopilar, sistematizar, promocionar, divulgar, apoyar, producir y exponer la aportación de los puertorriqueños a la cultura popular.
Impulsada por tal propósito, desde sus inicios ha desarrollado numerosas actividades. Por ejemplo:
• Noches de Arte y Bohemia, realizadas en el Paseo de las Artes en Caguas. • Campañas de medios para las pelÃculas “Héroes de otra patriaâ€, “Los DÃaz
de Dorisâ€, “El beso que me disteâ€, “El otro camino†y más reciente, “El
Cimarrónâ€.
• Colaboraciones continuas con el FotoMaratón y la Feria Internacional del
Libro.
• Reseñas musicales (semanales y especiales de dos horas) en “Desde otro
punto de vista†con Nellie Rivera y Ãngel RodrÃguez por WKAQ
Univisión Radio.
• Exposiciones como “René Marqués más allá de “La carretaâ€, “Chucho
Avellanet: Ãdolo de la Nueva Olaâ€, “Los 35 años de El Gran Combo de
Puerto Ricoâ€, “Tito RodrÃguez: Trayectoriaâ€, “De Antonio Paoli a Ricky
Martin†y “Mujeres con estilo propioâ€.
• Producciones discográficas como “Las noches de Nydiaâ€, “El placer fugaz
del amor: bertha MarÃa interpreta a Ketty Cabán†y la nueva grabación de
Lucy Fabery con Humberto RamÃrez.
• Campañas para el Grammy logrando la nominación del joven cuatrista
Manuel Alejandro en dos ocasiones.
• Publicación del libro Nueva Ola Portoricensis.
• Conversatorio de Nacha Guevara para estudiantes de arte en el Museo de
Arte de Puerto Rico.
• Conciertos navideños como “Homenaje al MesÃas†y “Enciende la estrella
de la pazâ€.
A todo este esfuerzo se añade la publicación de una página Internet (https://www.tradebit.com) con más de 500 biografÃas de artistas nacionales que son utilizadas por estudiantes y estudiosos de la cultura popular, tanto en Puerto Rico como en el extranjero. Cabe señalar que datos oficiales establecen que dicho portal fue visitado por unos 34,000 cibernautas durante diciembre de 2004 solamente.
Lucy Fabery y Humberto RamÃrez
Una obra que entrelaza generaciones
Ella es una leyenda viviente del filin.
Él es un un maestro de la expresión caribeña y jazzÃstica en el pentagrama popular contemporáneo.
Juntos, la cantante Lucy Fabery y el trompetista y director Humberto RamÃrez, acaban de completar una importante producción que reafirma la presencia de Puerto Rico en esta cadenciosa expresión musical, que echó raÃces a fines de la década de 1940 y que fusiona al bolero antillano con el jazz anglosajón.
La llamada «Muñeca de Chocolate» no sólo fue la pionera en la exposición del filin en nuestra patria, sino también su voz más internacional. Siempre impartiendo a sus interpretaciones un embrujante toque de sensualidad y clase con su voz aterciopelada y su personalÃsimo estilo. En eso, precisamente, radica su clave para que haya sido capaz de trascender ante nuevas corrientes musicales y de seguir fascinando a nuevos públicos.
A lo largo de su carrera discográfica, Lucy Fabery se ha codeado con muchos de los grandes baluartes de la música popular latinoamericana. Nombres como Julio Gutiérrez, Mario Ruiz Armengol, Jerry González, Giovanni Hidalgo y Eddie Gómez han enriquecido sus grabaciones. Mas, ante la necesidad de documentar para las generaciones venideras un nuevo proyecto que presentara el filin “a lo Lucy Faberyâ€, la Fundación Nacional para la Cultura Popular se propuso unir en el estudio a esta gran artista con el maestro Humberto RamÃrez. Tal combinación no pudo resultar más acertada. Porque “Humberto RamÃrez presenta… Divinamente, Lucy Fabery†es una producción seria que, a partir del filin, pone en justa perspectiva la aportación boricua a la bohemia.
Juntos le han dado una nueva dimensión a la obra de compositores puertorriqueños como Bobby Capó, Sylvia Rexach, Héctor Urdaneta, Plácido Acevedo y Myrta Silva. AsÃ, canciones como “Jugueteâ€, “Mi versiónâ€, “No llores másâ€, “Simplemente una ilusiónâ€, y “Yo quiero un besitoâ€, adquieren nuevos colores armónicos a cargo de este talentoso binomio.
Para agregar un toque internacional a esta joya, Lucy incluye “Summetimeâ€, clásico impostergable del jazz original de George Gershwin, y remoza el tema “Como los demásâ€, del cubano José Antonio Méndez. Además, como aportación representativa de la nueva generación, vocaliza “Inevitablementeâ€, aportada por Rodolfo Barreras, mientras que de la legendaria Puchi Balseiro estrena la titulada “Un amor y una canciónâ€.
Fiel a su leyenda como «Reina del Filin», la voz de la Fabery se proyecta profunda y emotiva. Y para complementar esa labor interpretativa a la perfección, Humberto RamÃrez ha sabido dirigir con maestrÃa e impecabilidad este ingenioso proyecto musical.
Contando con instrumentistas del calibre de Ãngel David Mattos (pianista); Danny Fuentes (trombonista); Reinaldo Castellanos (saxofonista alto); Manuel Pelayo (saxofonista tenor); MartÃn Santiago (bajista) y Fernan Rivera (baterista), “Divinamente†se convierte en una experiencia placentera y gratificante aún para el público más exigente.
AsÃ, a tono con los principios de la Fundación Nacional para la Cultura Popular, este proyecto va más allá de la música para responder a la necesidad en nuestro pueblo de entrelazar generaciones. De ahà que la experiencia interpretativa de la cantante se funda a la perfección con el Ãmpetu de un músico, arreglista y director que, luego de merecer un Grammy por la producción que realizara para Olga Tañón en el 2000, se ha ganado el respeto de las nuevas generaciones, tanto en su patria como en el extranjero.
“Humberto RamÃrez presenta… Divinamente, Lucy Fabery†es, por demás. documentación necesaria para las nuevas generaciones sobre el paso del boricua por las veredas del jazz y el filin. Y, más aún es, de igual manera, una invitación a fomentar la apreciación de nuestro talento en un estilo que, ante la creciente aceptación del jazz en nuestro paÃs, necesitaba una obra como ésta para reafirmar su vigencia en el nuevo siglo.